La Municipalidad de San Carlos de Bariloche finalizó con el análisis de las intervenciones que se realizaron días atrás en la avenida Bustillo, con el objetivo de mejorar la circulación general de la ciudad y darle fluidez al tránsito.
A tal fin, en primer término, se tomó la decisión de hacer sentido único un tramo de 8 kilómetros de la avenida Bustillo por el lapso de tres horas y sobre los semáforos del kilómetro 8,5 y 12,5.
Al respecto, al objetivo propuesto por el Gobierno Municipal, de mejorar el regreso de las playas, ambas intervenciones contribuyeron, evidenciando también la multiplicidad de variables que pueden jugar en el resto del sistema, clima, otras acciones de ordenamiento de tránsito, hábitos de conductores, entre otras cuestiones.
Cabe mencionar, que para poner en práctica esta prueba piloto, se logró poner en marcha un operativo en dos semanas, articulando con múltiples actores, generando una experiencia que desarrolla capacidades en equipos. Además, se crearon metodologías para la construcción de datos sobre el tráfico, transporte y consulta ciudadana, que ofrecen un nuevo piso de información para análisis y toma de decisiones.
En el tramo desde el kilómetro 12,400 hasta el kilómetro 1, fue posible: mejorar el caudal de vehículos sentido oeste- este, 1420 promedio por hora. Se contribuyó a las frecuencias y tiempo de viaje del TUP, mejorando en un 30% las frecuencias y tiempo de viaje en 20 minutos promedio. También se disminuyó el tiempo de regreso a casa. De los encuestados, un 59% demoró entre 30 y 60 minutos, mientras que un porcentaje similar de vecinos demoró el domingo anterior entre 60 y 90 minutos.
Respecto a la seguridad vial, no se reportaron accidentes de tránsito y en lo que hace a la información en la ciudadanía, de los encuestados el 92 % dijo estar informado. Aunque sí hubo turistas sin señal de internet, que no pudieron utilizar plataformas para conocer rutas alternativas.
Finalmente, se registró una congestión en el Centro de la ciudad. Este efecto se preveía que suceda, pero lo que se buscaba era validar cuales con los puntos que mayor carga y saturación presentaban. Detectando un nodo clave (Belgrano y 20 de Febrero), que aplicadas medidas de ordenamiento, mejoró la conexión con avenida De Los Pioneros con sentido al Oeste.
Por otra parte, se analizó la experiencia de intervenir los semáforos del kilómetro 12,5 y 8,5, pero sin modificar el sentido de Bustillo, que fue una semana después. En ese caso, con respecto al caudal vehicular, se notó un volumen de 640 vehículos por hora. A la vez que se pudo medir que el volumen en ambas direcciones Oeste-este, es muy similar, siendo solo un 10 % superior el flujo de diferencia de quienes regresaban desde los kilómetros. La medida en cuestión, mejoró la fluidez, sobre todo en el tramo definido entre km 13 y km1, sin embargo sigue presentando un patrón común de transito lento del km 13 al km 18, demandando evaluar otras alternativas.
En el TUP, se presentó una mejora de 10 minutos promedio. Si vale destacar, que mostró una constancia en los tiempos de recorrido más uniforme que domingos anteriores, según estadística SUBE.
A modo de conclusión, las ejecutadas, son intervenciones validas en temporada de verano, que requieren ser completadas con otras acciones de ordenamiento: estacionamiento en playas, giro a la izquierda en ruta, obras viales en caminos alternativos. El dato más revelador sobre los causales de congestión, fue la relación de modalidad optada para trasladarse.
En esa línea, se compararon automóviles y buses: por hora se necesitó promedio en las dos intervenciones 1047 automóviles para trasladar a 1571 personas estimativamente, y se requirieron 10 unidades de TUP para trasladar a 540 personas.
La mejora en la fluidez en los kilómetros, requiere intervenciones de obra pública, ya sea acelerar las existentes, como en el caso del kilómetro 1; como también en vías complementarias, para descomprimir las limitaciones estructurales de Bustillo, a partir del kilómetro 8.
De todos modos, en cualquier intervención que se determine, el centro de la ciudad es el factor clave, por ello haber confirmado las intersecciones críticas, y jerarquizar prioridades como lo es Belgrano y 20 de febrero, es una oportunidad para proyectar acciones en el corto plazo.