Se realizó en el Senado de la Nación la Sesión Pública Especial para declarar el repudio y preocupación por el atentado a la Vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Los parlamentarios se manifestaron sobre el conmocionante hecho.
La Senadora Silvina García Larraburu fue enfática al afirmar que: “Estamos aquí para repudiar enérgicamente el intento de magnicidio que sufrió el jueves por la noche la Vicepresidenta y dos veces Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner. Pasan los días y no podemos salir del estado de conmoción. ¿Se pueden imaginar lo que hubiese sucedido en la Argentina si esas balas salían?”.
Continuó diciendo: “Estuvimos ante las puertas del inicio de un nuevo ciclo de violencia política. Ante las puertas del abismo. Los fundamentos y principios del orden democrático estuvieron en juego. De esa democracia que tanto nos costó construir en estos casi 40 años. Y de la política, y el debate público, como medio para dirimir las controversias. Debemos dejar en claro que Fernando Sabag Montiel no salió de un repollo. No es un loco, o lobo solitario que un día se le ocurrió asesinar a nuestra Vicepresidenta. Es producto de un largo proceso de incubación de discursos reaccionarios, basados en el odio y la intolerancia. En dónde el ensañamiento con el peronismo y todo símbolo nacional y popular es moneda corriente.”
“Los peronistas no odiamos. Estamos convencidos que la Patria es el otro y que el amor siempre vence. Pero por alguna razón, o por muchas, por cada conquista social diría Cristina, nos condenaron y quisieron eliminarnos como fuerza política. Desde el viva el cáncer, a los bombardeos en la Plaza de Mayo, el golpe gorila del 55; hasta la última dictadura cívico-militar, fueron cimentando un antiperonismo proscriptivo y genocida. En la actualidad el poder económico ya no golpea las puertas de los cuarteles. Ahora tiene a su disposición la corporación judicial y mediática, que juega en tándem para generar odio en la sociedad. Evidentemente las imágenes de horcas y bolsas mortuorias que se exhibían en ciertas concentraciones, no fueron suficiente para que los instigadores se planteen frenar un poco. Querían ir por más y casi se produce un magnicidio en Argentina. Creo que hoy todas las fuerzas políticas debemos hacer un llamado a la reflexión y paz social.Debemos recuperar el valor de la política y el debate de ideas como pilares de la convivencia en democracia. Por eso, además de exigir el pronto esclarecimiento del atentado y la condena a todos los involucrados, digamos: NUNCA MÁS A LOS DISCURSOS DE ODIO EN ARGENTINA” Concluyó.