Con la presencia del ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis, la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras y el intendente de nuestra ciudad, quedó inaugurado el asfalto de la calle Genoveva Beveraggi, que es el ingreso a Colonia Suiza.
Se trata de uno de los grandes atractivos turísticos de la ciudad, en uno de sus barrios más alejados al que se accede a través del famoso Circuito Chico.
Para una ciudad como San Carlos de Bariloche, la conectividad vial es fundamental: no sólo garantiza que la comunidad pueda desarrollar sus tareas cotidianas, sino que los turistas también circulen con facilidad, algo clave en el principal destino turístico de la Patagonia. Con la llegada del pavimento en el acceso a Colonia Suiza -uno de los grandes puntos de atracción de la ciudad-, el Municipio saldó una deuda de décadas con su infraestructura.
El proyecto había estado en danza en varias administraciones municipales, pero nunca había logrado concretarse, para desilusión de los vecinos de este barrio ubicado a 25 km del centro de Bariloche y al que se accede por tres posibles ingresos: el llamado “camino viejo” que recorre cornisas sobre la costa del lago Moreno, y dos entradas desde Circuito Chico, la hermosa ruta provincial 77 que recorre la zona de Llao Llao.
Ninguno de los ingresos estaba pavimentado, y todos se dificultan: en invierno por las intensas nevadas que se dan en la zona oeste (se complica mucho despejar la nieve en una arteria no asfaltada), y en verano por el impacto que tienen en el ripio los cientos de vehículos que llegan a diario con turistas que buscan disfrutar de esta suerte de aldea de montaña.
Hubo etapas particularmente desafiantes para los vecinos, cuando por ejemplo se superpusieron el derrumbe de piedras que obstaculizó el “camino viejo” y la rotura del puente del arroyo Goye que cortó el acceso por la calle Beveraggi.
Es en este punto que se proyectó el pavimento con flexible. Casi 3 kilómetros separaban Colonia Suiza de la ruta de Circuito Chico. Ya en 2006 el entonces intendente Alberto Icare había incluido la obra en un plan masivo de pavimentación pero no pudo concretarlo. En 2014, tras 8 años de espera, los vecinos volvieron a ilusionarse con el regreso del proyecto en la gestión de María Eugenia Martini, pero tampoco pudo ser.
Hoy, 8 años después los vecinos ven con incredulidad la finalización de la obra de asfalto, que el actual intendente Gustavo Gennuso logró concretar, cerrando un ciclo de expectativas fallidas. Este verano ya pudo ser utilizada esta arteria y el cambio fue notorio y rotundo.
Como en otros casos de obras de infraestructura de gran magnitud que Bariloche necesitaba -gas natural, agua potable, electricidad, redes cloacales, la integración urbana de Av. Bustillo-, Gennuso estructuró una articulación clave con la gobernadora rionegrina Arabela Carreras y con la Nación, para materializar proyectos que hubieran sido inabarcables para el Municipio, más aún con la pandemia que arrasó con la economía de la ciudad al suspender la industria turística.
Así, el Municipio con la asistencia del Gobierno de Río Negro pudo aprovechar el plan Argentina Hace II -una iniciativa del Ministerio de Obras Públicas de la Nación, para impulsar la economía a través de la reactivación de la obra pública- para presentar a través del gobierno provincial el proyecto del pavimento flexible para Colonia Suiza.
No faltaron las dificultades: la licitación se concretó en agosto de 2020 con un presupuesto pautado en 78 millones de pesos, pero con la galopante inflación del período hubo que realizar una actualización de casi el 40% y terminó en casi 100 millones de pesos.
La obra se adjudicó en mayo de 2021 a la empresa Codistel, y el Municipio fue el encargado de administrar la ejecución, que comenzó rápidamente en junio, aprovechando el invierno para realizar todos los trabajos preparatorios, que eran muchos: el alcantarillado, los desagües pluviales, ensanches y taludes, previos a la sub-base que se pudo realizar ya en los meses de primavera.
La carpeta asfáltica comenzó a colocarse al fin a mediados de noviembre, y el pasado 10 de diciembre la pavimentación en flexible quedó oficialmente terminada. Luego se completaron los trabaos con la señalización vertical y horizontal, que se realizaron con el tránsito ya abierto para que residentes y turistas, pudieran comenzar a transitar el nuevo acceso en la existosa temporada de verano que acaba de concluir.
También hubo desafíos que tienen que ver con la geografía y el entorno natural de la zona, colmada de bosques nativos y añosos ejemplares de coihues, lauras y cipreses, y su carácter de patrimonio histórico y cultural (Colonia Suiza ha sido declarada hace algunos años como Poblado Histórico por la Provincia).
Por eso, el proyecto de obra fue realizado respetando las indicaciones conjuntas del Municipio, la Junta Vecinal de Colonia Suiza y la Comisión Municipal de Preservación del Patrimonio Histórico, Arquitectónico y Urbano.
Esto implicó delimitar de manera estricta el área del camino para evitar la tala excesiva de árboles (cuidando además las raíces de árboles cercanos), respetar el ejemplar de coihue de 350 años conocido como “El Abuelo” (emplazado sobre la misma calle Beveraggi que se acaba de pavimentar) y mantener la característica de tránsito mixto vehicular y peatonal de la arteria.
Quienes tengan la oportunidad de visitar Bariloche este invierno, serán los primeros turistas en acceder a Colonia Suiza a través de este renovado acceso y disfrutar de una obra que los barilochenses no dudan en calificar como histórica.