El Espacio Asambleario Autónomo repudia el atolondrado intento de reformar la Ley de Tierras que impulsa el oficialismo en Río Negro, a través de la sanción exprés de cuatro proyectos que propicia el gobernador electo Alberto Weretilneck. Si bien involucran cerca de 5 millones de hectáreas que en una proporción significativa están en posesión de comunidades mapuche-tehuelches, la maniobra ignora el mecanismo de consulta previa e informada que establece la normativa internacional vigente en la Argentina.
La celeridad con que la Legislatura aspira a aprobar las iniciativas se emparenta con los intentos de reformas constitucionales en Jujuy y La Rioja, en función de poner el sistema jurídico al servicio del saqueo de los bienes comunes, despojo que en la provincia avanza sin interrupciones hace décadas en desmedro de la presente y las futuras generaciones.
La nueva arremetida de Weretilneck y la bancada oficialista responde a una metodología que ya conocemos: el 29 de diciembre de 2011 se derogó la ley anti-cianuro entre gallos y medianoche y durante el año que transcurre -pleno de acontecimientos electorales que concentran la atención de la población- se derogaron las leyes ambientales que protegían el Golfo San Matías de los impactos de la actividad petrolera. Los sucesivos gobiernos de Juntos Somos Río Negro (JSRN) son coherentes con su objetivo de derribar las conquistas populares.
El Espacio Asambleario Autónomo recuerda que la megaminería forma parte de una trama compleja que se impone a los pueblos, en el marco de un esquema colonial que se acentuó en los últimos años ante el peso de nueva deuda externa ilegítima, deuda que también es ecológica y que se diseñó al aprovechar la ignorancia y la indiferencia que edifican los medios de comunicación de las corporaciones.
La deuda ecológica es hermana de la que tomaron y pagan los gobiernos al Fondo Monetario Internacional (FMI). Cuando se contrae, los presidentes, gobernadores y legisladores prometen bondades, pero en ninguna parte del mundo se pudieron cumplir las promesas de desarrollo para las comunidades. La bonanza económica no tiene que ver con los balances de compañías cada vez más concentradas, sino con el buen vivir de los pueblos.
Los códigos mineros se impusieron 20 años atrás en unos 70 países, a instancias del Banco Mundial y el FMI. Las corporaciones mineras y los acreedores de la deuda externa son los mismos o están asociados. El extractivismo financiero, minero, petrolero o pesquero es viable económicamente porque recibe subsidios, favores fiscales y seguridad jurídica, como los que se apresta a sancionar la Legislatura de Río Negro.
Como contrapartida, el partido JSRN se niega sistemáticamente a completar el Relevamiento Territorial de las Comunidades Indígenas (RETECI) que dispuso la Ley Nacional 26.160. Tampoco avanzar hacia una ley de propiedad comunitaria de los territorios indígenas, porque sustraería del funcionamiento capitalista a una proporción considerable del eufemismo llamado “tierras fiscales”.
El Espacio Asambleario Autónomo denuncia el racismo estructural que orienta el accionar de los gobiernos, siempre en desmedro del pueblo mapuche-tehuelche y en connivencia con los poderosos, aunque esa identificación signifique cada vez más desigualdad, enfermedades derivadas de la contaminación, pobreza y pérdida de culturas ancestrales.
Cuando ante de las últimas PASO (Primarias Abiertas Simultáneas Obligatorias) proclamamos que gane quien gane en Patagonia la lucha continúa, no nos equivocamos.
Claramente nos pronunciamos contra el saqueo minero y petrolero porque era evidente que el modelo de saqueo y contaminación no estaba en discusión, pero hay que admitir que ni el más pesimista de nosotres pudo advertir que la maquiavélica arremetida surgiría durante la transición gubernamental y días antes del balotaje nacional. El capitalismo extractivista y sus gerentes ocasionales no saben de escrúpulos.
Junto con las organizaciones y comunidades del pueblo mapuche-tehuelche que ya se pronunciaron, el Espacio Asambleario Autónomo insta al conjunto de la sociedad a permanecer en estado de alerta y movilización, ante la renovada patraña que impulsan lo peor de la política y sus sostenes corporativos.
¡No pasarán!
¡No es No!
¡De pie los pueblos que frenan el saqueo colonial!
¡En Patagonia luchamos, gane quien gane!
16 de noviembre de 2023.
Espacio Asambleario Autónomo
Integrantes:
Espacio de Articulación Mapuche y Construcción Política (Bariloche)
Organización Ecologista Piuke (Bariloche)
Sociedad Ecológica Regional (Comarca Andina)
Vecinxs Autoconvocadxs (Comarca Andina)
Autoconvocadxs Cordilleranxs (Villa La Angostura)
Asamblea Permanente del Comahue por el Agua (Allen)