En el marco de las acciones preventivas de enfermedades zoonóticas, el Ministerio de Salud, a través de la Coordinación de Salud Ambiental, brinda a la comunidad medidas esenciales para prevenir la encefalitis equina, una enfermedad viral transmitida principalmente por la picadura de mosquitos infectados que puede afectar tanto a equinos como a seres humanos.
En el caso de la Encefalitis Equina del Oeste (EEO), la transmisión a humanos y equinos es a través de la picadura de un mosquito que previamente se infectó luego de alimentarse en un reservorio con el virus (un ave o roedor silvestre). Es importante remarcar que no se transmite desde caballos a humanos ni entre humanos.
Las enfermedades causadas por el virus de la Encefalitis Equina del Oeste van desde cuadros leves (cefalea, fiebre) hasta meningitis aséptica y encefalitis. El período de incubación de la EEO varía de 2 a 10 días. Presenta un comienzo súbito con dolor de cabeza seguido de decaimiento, escalofrío, fiebre, mialgias y malestar general. Las manifestaciones neurológicas aparecen al cabo de varios días y pueden incluir letargo, somnolencia, rigidez de nuca, fotofobia, y vértigo, y en casos graves, estupor y coma. Los síntomas más frecuentes son debilidad y temblores generalizados. Generalmente la mejoría comienza varios días después de la defervescencia, entre 1 semana a 10 días.
Recomendaciones para la prevención y control de mosquitos:
Evitar la acumulación de agua en el suelo.
Desmalezar los predios y mantenimiento del pasto.
Eliminar y proteger recipientes y otros objetos que puedan acumular agua dentro de los establecimientos de cría de animales, viviendas y en sus alrededores. En particular, bebederos de caballos.
Prevención de picaduras por mosquitos:
Colocar telas mosquiteras en puertas y ventanas de recintos de animales y viviendas.
Usar ropa de trabajo clara y de manga larga.
Utilizar espirales en el exterior y pastillas o aerosoles en el interior de las edificaciones.
Aplicar periódicamente repelentes de insectos con el ingrediente activo DEET mientras se realizan tareas en el exterior o dentro de establecimientos de animales.
El uso de repelentes con citronella como principio activo tienen un efecto menor que los que contienen DEET. Otros herbales como tinturas de clavo de olor, palo amargo, entre otras, no son efectivos contra la picadura de mosquitos.
En relación al uso de insecticidas, es importante señalar que la fumigación sólo permite eliminar a los mosquitos adultos y lo más importante, no afecta a los estadios inmaduros. No presenta acción residual por lo que poco tiempo después de su utilización de esas formas inmaduras emergen mosquitos adultos que no se verán afectados.
Por esto, la fumigación con insecticidas adulticidas sólo es posible como una medida de control en los alrededores del establecimiento donde se alojen los equinos enfermos o en espacios verdes de centros urbanos donde se detecte una abundancia elevada de mosquitos. La fumigación no es una acción de prevención en ningún caso.