El Gobernador Alberto Weretilneck volvió a cuestionar con dureza al Gobierno Nacional por el estado crítico de las rutas nacionales que atraviesan Río Negro. “No les interesa el interior. Ya lo dijo su propio vocero, no les importan las rutas. Viven en su microclima del Obelisco y el resto que se arregle como pueda”, dijo y aseguró que “la plata para arreglar las rutas está, la recauda Nación de los impuestos que aportamos los rionegrinos”.
“La Nación recauda el impuesto a los combustibles cada vez que cargamos nafta o gasoil. Ese dinero, que representa casi el 40% del valor del litro, está destinado por Ley al mantenimiento de las rutas. Pero se quedan esa plata y no sabemos para qué la usan. No se ve en obras ni en mantenimiento. Las rutas están destruidas”, denunció.
El Mandatario describió el alarmante estado de los principales corredores viales nacionales que atraviesan la provincia, como las rutas 22, 23, 151, 3 y 40. “Hay pozos profundos, banquinas erosionadas, obras paralizadas desde hace años. En la Ruta 151, entre Catriel y Cinco Saltos, los accidentes son constantes. La Ruta 22, en tramos como Río Colorado, Chimpay o Regina, está totalmente deteriorada. Lo mismo ocurre en la 23 y la 40. Los baches bajo el puente ferroviario de Cipolletti y en el puente 83 son directamente un escándalo. Estamos hablando de un riesgo concreto para la vida de quienes transitan por allí cada día”.
En diálogo con Canal 10, el Mandatario explicó que la Provincia ha planteado todas las alternativas posibles: la cesión de las rutas, convenios de mantenimiento conjunto, administración operativa. “No obtuvimos ni una sola respuesta. Pero, además, si nosotros intervenimos por cuenta propia, es ilegal. Son rutas bajo jurisdicción nacional. Y si ocurre algo, la responsabilidad es nuestra. Es una encerrona sin salida”.
Weretilneck también remarcó el impacto cotidiano que esta situación genera sobre la vida de las y los rionegrinos: “El tiempo que pierden los vecinos para ir a trabajar, estudiar o hacer trámites es terrible. Las colas entre Cipolletti y Neuquén a las 7 de la mañana o a las 6 de la tarde son interminables. Todo por falta de obras viales que deberían estar financiadas con recursos que ya existen, pero que la Nación no ejecuta”.
Por eso, adelantó que el Gobierno de Río Negro está evaluando recurrir a la vía judicial para exigir el cumplimiento de las obligaciones nacionales. “No estamos pidiendo privilegios. Estamos exigiendo lo que nos corresponde como provincia, lo que nos quitan cada vez que cargamos combustible”, cerró.